El príncipe Harry ha sido acusado de “hostigamiento e intimidación” por Sophie Chandauka, presidenta de la organización benéfica Sentebale, que el propio príncipe ayudó a fundar en 2006 junto con el príncipe Seeiso de Lesotho. Esta semana, el hijo menor del rey Carlos III anunció su renuncia como padrino de la ONG, en solidaridad con los cinco miembros del consejo de administración que dimitieron debido a un conflicto con Chandauka. Sin embargo, la presidenta acusó a Harry de actuar de manera unilateral y sin previo aviso.
El conflicto y las acusaciones
El conflicto surgió cuando Chandauka, abogada de origen zimbabuense, intentó frenar su destitución mediante un proceso legal en la Alta Corte de Londres, lo que generó una crisis interna en la organización. Como resultado, cinco miembros del consejo renunciaron colectivamente. En declaraciones a Sky News, Chandauka aseguró que Harry había difundido “información dañina” al público sin consultarla previamente ni a los directores de Sentebale. La presidenta calificó la situación como un caso de “hostigamiento e intimidación a gran escala”. En respuesta, Kelello Lerotholi, exmiembro del consejo, rechazó las acusaciones sin entrar en detalles adicionales.
Denuncias de abuso de poder y racismo
Chandauka también ha señalado que su rol dentro de Sentebale ha sido difícil debido a las denuncias de abuso de poder, intimidación, misoginia y racismo hacia las mujeres negras dentro de la organización. El príncipe Harry cofundó Sentebale cuando tenía solo 21 años, inspirado por el legado humanitario de su madre, la princesa Diana, quien dedicó gran parte de su vida a luchar contra el sida y a apoyar a los niños huérfanos afectados por la enfermedad.