El cantante Enrique Iglesias ha anunciado que será padre por cuarta vez a los 50 años, una noticia que ha generado revuelo y pone sobre la mesa una realidad cada vez más común: el aumento de la paternidad en edades avanzadas. Aunque los riesgos de un embarazo tardío en la mujer son ampliamente conocidos, cada vez más estudios advierten sobre las posibles consecuencias de la edad paterna en la salud del bebé.
En España, la tendencia es clara. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2023 más del 20% de los padres primerizos tenían 40 años o más. En 2008, este porcentaje era del 9,5%, y si retrocedemos hasta 1980, la edad media de los padres al tener su primer hijo rondaba los 27 años. En 2023, esta media alcanzó los 34,5 años, reflejando un cambio cultural y social importante.
¿Hasta cuándo puede un hombre ser padre?
La fertilidad masculina no tiene una fecha de caducidad exacta, pero sí una curva descendente. François Peinado Ibarra, jefe del Servicio de Urología del Hospital Ruber Juan Bravo y profesor en la Universidad Europea, explica que “tener hijos a partir de los 50 años es cada vez más frecuente, aunque desde el punto de vista biológico no es lo habitual”.
Con el paso del tiempo, la calidad del esperma disminuye. A partir de los 40 años, se reduce el volumen del semen, baja la concentración espermática y empeora la movilidad de los espermatozoides, lo que complica la fecundación. Además, la morfología espermática —la forma y estructura de los espermatozoides— también se ve afectada, dificultando su capacidad para alcanzar y penetrar el óvulo.
Consecuencias para la salud del bebé
Más allá de la fertilidad, la edad del padre puede influir directamente en la salud del futuro hijo. Un estudio reciente en Estados Unidos indica que por cada década adicional en la edad paterna, aumentan las complicaciones durante el embarazo, incluyendo el riesgo de parto prematuro, bajo peso al nacer y diabetes gestacional en la madre.
Peinado advierte también que una mayor edad paterna se asocia con un incremento en los riesgos de trastornos genéticos y neuropsiquiátricos. Entre ellos, se han observado mayores probabilidades de desarrollar autismo, esquizofrenia y otros trastornos del neurodesarrollo. Esto podría estar relacionado con la fragmentación del ADN en los espermatozoides, un fenómeno más común en hombres mayores, que a su vez está vinculado a tasas más altas de infertilidad y abortos espontáneos.
Desde el Instituto Bernabeu de Medicina Reproductiva también advierten que las alteraciones genéticas en los espermatozoides de hombres mayores de 50 años podrían estar detrás del aumento de ciertas patologías en los hijos.
¿Es seguro tener hijos después de los 50?
A pesar de los riesgos, los expertos coinciden en que, gracias a los avances en medicina reproductiva y a un mayor enfoque en la salud masculina, muchos hombres mayores de 50 años pueden ser padres sin mayores complicaciones. Eso sí, es importante estar bien informado, realizar controles médicos y tener en cuenta tanto los factores biológicos como los emocionales y sociales que implica la paternidad en edades avanzadas.
