Autoridades francesas confirmaron que las joyas de la corona robadas del Museo del Louvre tienen un valor estimado de 88 millones de euros, aunque su venta sería prácticamente imposible.
El Museo del Louvre, en París, fue escenario de lo que medios franceses ya califican como el “robo del siglo”. Ocho joyas de la corona francesa, exhibidas en la emblemática Galería de Apolo, fueron sustraídas el domingo pasado en un golpe “extremadamente espectacular”, según reveló la fiscal Laure Beccuau.
En declaraciones al canal RTL, Beccuau informó que la investigación “avanza” y que al menos cuatro personas habrían participado en el asalto. Además, no se descarta la complicidad interna dentro del museo.
“Las piezas robadas tienen un valor estimado de 88 millones de euros, pero los asaltantes jamás obtendrán esa suma si deciden fundir o desmontar los objetos”, advirtió la fiscal.
🔍 Una investigación con múltiples pistas
Las autoridades francesas analizan cámaras de seguridad, rutas de escape y posibles vínculos entre los sospechosos y empleados del museo. La magnitud del robo ha desatado una ola de críticas hacia la dirección del Louvre y el Ministerio de Cultura, por supuestas fallas en los protocolos de seguridad de una de las instituciones culturales más prestigiosas del mundo.
El robo se descubrió en las primeras horas del domingo, lo que obligó al cierre inmediato del recinto hasta este miércoles por la mañana, cuando reabrió parcialmente sus puertas al público.
🎨 Turistas vuelven al Louvre tras el cierre
A pesar del escándalo, el regreso de los visitantes al museo fue recibido con entusiasmo.
“Nos sentimos afortunadas de poder visitar el Louvre. Sabemos que muchos no pudieron hacerlo estos días”, expresó la puertorriqueña Anabel Nieves, una de las primeras turistas en ingresar tras la reapertura.
Miles de viajeros se quedaron sin poder recorrer el museo durante los tres días de cierre, pero la mayoría coincidió en que el incidente no afecta la imagen ni el atractivo cultural de Francia.
“Contamos los minutos para ver la Mona Lisa”, añadió Nieves, reflejando el sentimiento general de los visitantes.
