La primera película protagonizada por Anthony Mackie arrancó con cifras sólidas, alcanzando los 100 millones de dólares en Estados Unidos y 192,4 millones a nivel mundial. Sin embargo, las críticas desfavorables y un boca a oreja negativo han provocado una fuerte caída. Según informes de medios estadounidenses, la cinta registró un descenso del 68% en su segundo fin de semana, recaudando apenas 28,3 millones de dólares en Estados Unidos. Esto sitúa el total nacional en 141 millones de dólares y el global en 289,4 millones de dólares, lo que evidencia las dificultades de Marvel Studios para captar al público.

Por Editorial

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *