A más de una década de su llegada a Marte, el rover Curiosity continúa enviando valiosa información científica. En una entrevista exclusiva con Gizmodo, la Dra. Elena Amador-French, jefa de operaciones científicas en el Jet Propulsion Laboratory (JPL), destacó los principales hallazgos del vehículo, su impacto en futuras misiones y el estado actual del proyecto.
Curiosity aterrizó en 2012 con una misión inicial de dos años, pero aún sigue activo. Desde entonces, ha explorado el cráter Gale, una antigua cuenca que posiblemente albergó un lago hace millones de años. Allí, el rover ha recolectado datos que indican que Marte tuvo las condiciones necesarias para la vida: agua líquida, compuestos químicos esenciales como carbono, azufre y oxígeno, y fuentes potenciales de energía.
Uno de los descubrimientos más importantes fue la presencia de filosilicatos, minerales que solo se forman en ambientes acuosos estables. También se identificaron moléculas orgánicas, gracias al instrumento SAM, aunque esto no prueba la existencia de vida pasada, sí refuerza la idea de que Marte fue un entorno habitable.
La Dra. Amador-French lo resume con precisión: “Podemos decir que las condiciones para que haya existido vida en Marte estuvieron. Eso no significa que la vida estuvo allí, pero sí que pudo haber existido.”
