Tras casi nueve horas de discusión, la Cámara de Diputados aprobó la iniciativa de la presidenta Claudia Sheinbaum para reformar la Ley General de Salud y prohibir la venta y fabricación de cigarrillos electrónicos y vapeadores, con sanciones que podrían llegar hasta los ocho años de prisión y multas de 226,080 pesos. El dictamen fue turnado al Senado de la República para su análisis.

La votación final cerró con 292 votos a favor y 163 en contra. Las bancadas del PRI, PAN y Movimiento Ciudadano rechazaron la propuesta, argumentando una presunta “criminalización” del consumo y portación de estos dispositivos.

Morena aclara que no habrá penalización al consumidor

Para atender estas inquietudes, Morena y sus aliados aprobaron una reserva de último momento que excepciona el consumo y la posesión personal, dejando claro que las sanciones aplicarán únicamente a quienes adquieran, distribuyan o fabriquen vapeadores con fines comerciales, incluidos los dispositivos desechables o de un solo uso.

La reforma define como prohibidos todos los aparatos mecánicos, electrónicos o de cualquier tecnología destinados a calentar, vaporizar o atomizar sustancias tóxicas —líquidas, geles, ceras, sales, aerosoles secos, resinas o aceites— con o sin nicotina.

Asimismo, se prohíbe la publicidad y propaganda de vapeadores por cualquier medio, ya sea impreso, digital, televisivo, radial o a través de otras plataformas.

Otras reformas aprobadas: medicamentos y Fondo de Salud

Además de la prohibición de vapeadores, el dictamen incluye otras modificaciones importantes a la Ley General de Salud:

  • Fondo de Salud para el Bienestar (Fonsabi):
    Se elimina la obligación de destinar al menos el 8% del Fondo a la atención de gastos catastróficos, como cáncer, infartos, VIH o cuidados intensivos neonatales.
    Legisladores de oposición advirtieron que esto podría debilitar la atención a enfermedades graves.
  • Contrataciones consolidadas:
    Se establece que la Secretaría de Salud será la dependencia rectora encargada de coordinar la compra consolidada de medicamentos, equipos de alta tecnología e insumos médicos.
  • Nuevas disposiciones:
    Se incorpora el concepto de salud digital y se amplía la regulación sobre productos sanguíneos, bancos de células troncales, centros de colecta y establecimientos de medicina regenerativa.

Implicaciones para los estados, incluido Nayarit

Las reformas podrían tener efectos directos en los sistemas estatales de salud. En el caso de Nayarit, donde existe una alta demanda de atención por enfermedades de alto costo y un proceso de transición hacia un modelo de salud centralizado, los cambios al Fonsabi y a las compras consolidadas de medicamentos serán temas clave a monitorear en los próximos meses.

La discusión continuará en el Senado, donde se definirá la versión final de la reforma.

Por Editorial

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